Las reglas del juego. Prevención de riesgos laborales
28 de abril Día Mundial de la Seguridad y Salud en el trabajo
Trabajadores seropositivo siguen siendo discriminados a pesar de su potencial
“El trabajador seropositivo puede dar el cien por ciento de su capacidad productiva y el empleador debe entender que el hecho de que una persona sea portadora del virus; no quiere decir que sea una persona que deja de producir”
Este 28 de abril se conmemora, el Día Mundial de la Seguridad y la Salud en el Trabajo, efeméride que surgió de la iniciativa de las organizaciones sindicales canadienses como protesta por la muerte de 28 trabajadores de la construcción de Bridgeport, en Estados Unidos. Desde entonces un número importante de sindicatos de todo el mundo desarrollan acciones no sólo en recuerdo de los hombres y mujeres que pierden la salud e incluso la vida por el trabajo, sino reivindicando y denunciando las condiciones laborales que ocasionan los accidentes de trabajo.
Este año las actividades con motivo de la citada fecha se centrarán en la promoción de un trabajo sin riesgos, un trabajo digno, y en la problemática del VIH/Sida como un factor que hoy afecta a millones de trabajadores y trabajadoras en todo el mundo.
Cada año mueren 2 millones de hombres y mujeres en todo el mundo por accidentes de trabajo y enfermedades ocupacionales, entre ellos 12 mil niños y niñas, Asimismo, se producen 270 millones de accidentes de trabajo y 160 millones de enfermedades ocupacionales,y se estima que el 4 por ciento del producto interno bruto (PIB) se pierde como consecuencia de los accidentes y enfermedades relacionadas con el trabajo, cuyo costo para la economía asciende a 1,25 billones de dólares.
Ante tal panorama, es importante que como trabajadores y trabajadoras tomemos conciencia sobre esta situación, que no sólo enluta a miles de hogares; sino que además, muchos niños y niñas quedan huérfanos o las familias se desintegran, por eso nunca debemos olvidar tragedias como la ocurrida en Chernobil, Ucrania, donde el 26 de abril de 1986, una planta nuclear explotó causando la muerte de 59 trabajadores y trabajadoras de forma directa; mientras que otras miles de personas que vivían próximas a la zona del desastre resultaron afectadas como consecuencia de las radiaciones, a muchas de las cuales se les ha diagnosticado cáncer.
Un Trabajo Digno
Probablemente, todavía hoy en pleno siglo XXI, millones de trabajadores trabajan bajo condiciones que no sólo atentan contra su vida; sino además contra su integridad moral y contra sus propios derechos, basta con echar un vistazo a la situación de gran parte de los inmigrantes que viven en países desarrollados, tratando de encontrar un “futuro mejor”, y que por su condición de “ilegalidad” son sometidos a terribles condiciones de explotación, situación similar se vive en países cuyas sociedades son dominadas por creencias y costumbres religiosas que provocan la discriminación de la mujer en el trabajo, mientras que en otras naciones se tratan de imponer leyes que atentan contra la estabilidad laboral, como ocurrió recientemente en Francia, donde afortunadamente gracias a una acción decidida y frontal de los jóvenes trabajadores de ese país, evitaron que se aprobara la denominada Ley de Trabajo Juvenil que afectaba la estabilidad de los mismos, que además es la antítesis de lo que debería ser un trabajo digno, ¿pero que es un trabajo digno?, pareciera una mera abstracción, una simple definición, pero la verdad es que está ligado íntimamente a los derechos de los trabajadores
Un trabajo digno es un concepto integracionista y profundo en el que podemos destacar algunas características:
1. Es productivo y seguro
2. Mantiene respeto a los derechos laborales
3. Capaz de proporcionar ingresos adecuados
4. Brinda protección social
5. Permite diálogo social
6. Ofrece Libertad Sindical, negociación colectiva y participación
De aquí que sea de suma importancia la formación de los trabajadores y trabajadoras para que no sólo sean capaces de reconocer un trabajo digno; sino además, contribuir y exigir a que la actividad laboral que desempeñan verdaderamente dignifique al trabajador y por consiguiente a la sociedad misma.
Hacia una Estrategia de Prevención de VIH en los Centros de Trabajo
Para nadie es un secreto que los trabajadoras y trabajadores seropositivos, han tenido que superar infinidad de obstáculos para lograr tanto su aceptación social como su sobrevivencia. Igualmente, es una realidad inexorable que ciertos tipos de labores coloca en continuos riesgos de infección por VIH a trabajadores y trabajadoras, como es el caso de los profesionales de la salud: las enfermeras, los médicos, paramedicos y los auxiliares de emergencia, quienes deben tomar las medidas de bioseguridad aunque no estén al tanto de que determinado paciente pudiera estar infectado con el virus.
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