REFLEXIONES

Esto no es un artículo, literario, ni artístico, ni cultural. No trato de alimentar mi prestigio personal. No busco interesados contactos culturales. Rehuyo la celebridad. No deseo deslumbrarte. En realidad, apenas existo...

Sin embargo, estoy aquí y ahora. Puedes incluso imaginarme. Yo también he tenido un trabajo de mierda, sé qué significa ser vidriero, peón de obra, costalero, administrativo o dependiente; compruebo todos los días lo que significa desempeñar una labor estúpida que no tiene nada que ver conmigo. Reconozco la alienación. A mí también me aplasta la publicidad, también tratan de convencerme de que la felicidad consiste en comprar una casa más grande, cambiar de coche, beber determinado güisqui. También me fuerzan para que sea un ciudadano responsable y silencioso, para que cumpla un horario laboral y me case, para que vea fútbol y tenga una cuenta bancaria, un seguro de vida y otro de muerte para pagar el entierro. E incluso me vienen cada tres minutos con la historieta del éxito. Como te decía: estamos aquí y ahora.

Pero no estoy aquí para quejarme. Y para cambiar la vida: para empezar la mía. Quiero robar cada vez mayores porciones de mi vida a ese circulo mortal TRABAJO / CONSUMO / MUERTE, porque quiero que me devuelvan el tiempo robado, la libertad sustraída, pienso entregarme al encuentro libre y real con tod@s, quiero vivir en libertad, hacer lo que se me apetezca y porque me da la gana. Y cada vez que lo consiga, lograré vivir de verdad.